Y por fin llegó la fecha esperada. Septiembre es sin duda alguna uno de nuestros meses favoritos y, aunque por supuesto existen otros muchos eventos cinematográficos de gran importancia durante todo el año, nada es comparable a lo que vivimos durante las jornadas del Festival de Cine de San Sebastian. Este año llegamos a Donosti algo tristes puesto que apenas estaremos tres días en esta 63ª Edición; pero eso sí, intentaremos que sean los más intensos de nuestra historia en el Festival.
E igual que este mes, muy esperado era también para nosotros el estreno de la nueva película de Alejandro Amenábar: "Regresión". Un thriller psicológico inspirado en hechos reales que pone fin a los 6 años que el director chileno ha estado sin estrenar proyecto, y cuya presentación mundial se ha llevado a cabo como película inaugural fuera de concurso de la Sección Oficial.
Nos cuesta mucho criticar el trabajo de este director al que tanto admiramos pero sintiéndolo mucho, hemos de reconocer que en esta ocasión no da la talla. Esto no quiere decir que "Regresión" sea una malísima película, pero sí un título al uso flojo dada la experiencia del director, cuya factura técnica es incuestionable pero cuya trama es poco arriesgada, predecible y nada inquietante. Con toda seguridad, nos resulta el trabajo más impersonal de Amenábar y quizá esto es lo que más nos decepciona.